El doctorando Rafael Guerrero Tomás del Programa de Educación defiende su tesis doctoral titulada “La personalidad eficaz en adolescentes diagnosticados de Trastorno por déficit de atención con hiperactividad Hiperactividad (TDAH)” en la Facultad de Educación. Esta tesis ha sido dirigida por las profesoras Raquel de la Fuente Anuncibay y María Eugenia Martín Palacio.
La mayoría de investigaciones que se han hecho sobre población diagnosticada de Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) se han centrado principalmente en el ámbito académico, conductual y en las funciones ejecutivas. El principal objetivo de esta investigación es estudiar el perfil de la población adolescente, cuyas edades oscilan entre los 12 y los 18 años diagnosticados de TDAH, a partir del análisis de las cuatro dimensiones del constructo de Personalidad Eficaz (Fortalezas del Yo, Demandas del Yo, Retos del Yo y Relaciones del Yo). Se estudia si existen diferencias en cuanto al género, edad y si reciben o no algún tipo de tratamiento psicológico o farmacológico. Además, se pretende estudiar si existen diferencias en la puntuación total del Cuestionario de Personalidad Eficaz, así como en las cuatro esferas de dicho constructo (Fortalezas del Yo, Demandas del Yo, Retos del Yo y Relaciones del Yo) entre los adolescentes diagnosticados de TDAH y el grupo control (adolescentes de entre 12 y 18 años sin el diagnóstico de TDAH).
El cuestionario se pasó a un total de 250 adolescentes diagnosticados de TDAH de entre 12 y 18 años a lo largo de todo el territorio nacional. La distribución por género fue de 189 (75,6%) varones y 61 (24,4%) mujeres. Se compararon los resultados de dicha población con una muestra control de 112 adolescentes pertenecientes a un colegio del Principado de Asturias con el mismo rango de edad y sin ningún tipo de diagnóstico.
Los resultados muestran que para la población de adolescentes diagnosticados de TDAH existe un total de cuatro tipologías con características diferentes entre ellas. Se encontró que las puntuaciones en la escala general de Personalidad Eficaz y en las dimensiones de Fortalezas y Relaciones los jóvenes varones obtienen puntuaciones significativamente superiores que las mujeres. En cambio, no se encontraron diferencias significativas cuando el adolescente recibe un tratamiento psicológico y/o farmacológico en comparación con los que no lo reciben. Tampoco existen diferencias en la puntuación de Personalidad Eficaz en cuanto a la edad se refiere.
Esta investigación demuestra que ni el tratamiento psicológico ni el farmacológico suponen mejorar las puntuaciones en el Cuestionario de Personalidad Eficaz. Los adolescentes que no están diagnosticados de TDAH obtienen significativamente mejores puntuaciones generales en el Cuestionario de Personalidad Eficaz que los jóvenes diagnosticados de TDAH en la escala general, así como en Fortalezas, Retos y Relaciones. Estos nos hace concluir que los programas existentes en la actualidad para trabajar el ámbito social y emocional del joven diagnosticado de TDAH no son efectivos para trabajar este tipo de variables.