Félix Rodríguez de la Fuente se incorporará al Claustro de la Universidad de Burgos como doctor honoris causa in memoriam
El Aula Magna de la Universidad de Burgos acogió un años más la Fiesta de la Universidad, solemne acto académico en el que, además de la entrega de atributos y diplomas a los nuevos doctores, tuvo lugar la investidura in memoriam de Félix Rodríguez de la Fuente como doctor honoris causa de la UBU.
El acto comenzó con la entrega de atributos y diplomas a los doctores que obtuvieron el grado durante el año 2012. Intervino en nombre de sus compañeros Sara Gutiérrez González. Posteriormente se procedió a la entrega de los diplomas a los doctores distinguidos con el Premio Extraordinario de Doctorado. A continuación el rector procedió a la investidura in memoriam de Félix Rodríguez de la Fuente como doctor honoris causa de la UBU. La Universidad de Burgos quiere de esta forma reconocer su actividad de divulgación científica, su inmenso legado y su ingente y creativa obra en defensa de los animales y del medio ambiente, incorporando la memoria de Félix Rodríguez de la Fuente al Claustro universitario burgalés. En representación de Félix Rodríguez de la Fuente asistieron al acto su mujer Marcelle y sus hijas
Rodríguez de la Fuente está considerado en el mundo como uno de los mil protagonistas del siglo XX, una figura de gran valía proyectada hacia la inmortalidad. Tenaz y luchador, audaz y valiente, dirigió con gran maestría a un grupo de científicos, expertos, filmadores y aventureros que nos transmitieron el respeto y su amor por la naturaleza. Incansable trabajador, con gran capacidad expresiva y una voz rotunda, llena de vida y extraordinariamente atractiva por el énfasis que ponía, por su facilidad de palabra y riqueza de vocabulario, Félix se ha convertido en el símbolo de una generación y su mensaje hoy tiene más proyección y vigencia que nunca.
Durante la ceremonia actuó como madrina María Teresa Sancho, catedrática de Nutrición y Bromatología de la Facultad de Ciencias.
Biografía de Félix Rodríguez de la Fuente
De la mano de Félix, España se convirtió en el primer país europeo en implantar leyes que protegiesen las aves de presa, en un país pionero en conciencia ecológica e interés del público por la naturaleza.
Félix Rodríguez de la Fuente nació en Poza de la Sal, Burgos el 14 de marzo de 1928 y falleció en Alaska, 14 de marzo de 1980. Excelente divulgador ambientalista, fue pionero en España en la defensa de la naturaleza.
El personaje es bien conocido por todos. Un hombre adelantado a su tiempo que utilizó todos los medios de comunicación para trasladar su pasión por el entorno y su preocupación por la implacable destrucción del mismo. Pero la persona, desconocida para muchos, fue la que trascendió todas las barreras de cultura, prejuicios y costumbres para llegar al corazón de millones, independientemente de edad y procedencia.
Su mensaje fue calando y con la ayuda de otros pioneros conservacionistas, provocó un cambio en la sociedad española impulsándola hasta otro lugar muy diferente del que provenía. Cuando Félix comenzó a difundir su mensaje, en España se premiaba el envenenamiento y la matanza indiscriminada de las entonces consideradas alimañas, es decir, casi toda la fauna carnívora. De la mano de Félix, España se convirtió en el primer país europeo en implantar leyes que protegiesen las aves de presa, en un país pionero en conciencia ecológica e interés del público por la naturaleza.
Félix rescató la tradición oral, tan importante en la historia de la cultura humana pero enterrada en el pasado por el peso de la escritura y de los modernos medios de comunicación; rescató la magia de las leyendas y la fuerza de la improvisación para reconectarnos con el gozo ancestral de perdernos en las palabras, preñadas de mensaje, del chamán.
Trayectoria divulgativa
Desde el momento de su despegue como divulgador, la carrera de Félix fue imparable. En pocos años pasó a ser uno de los hombres más conocidos del momento. En la década de los sesenta escribió artículos en la revista Blanco y Negro y apareció en programas de televisión, sobre todo, dedicados a los niños.
En 1965 Félix aparece con sus halcones en el programa Fin de Semana de Televisión Española, llamando la atención del público que insistía en verlo de nuevo. Lo cual cambiaría su vida e influiría en la de varias generaciones de españoles que comenzaron a seguirlo en sus apariciones en la pequeña pantalla.
El éxito de la producción de su primer documental: Señores del espacio le permitió estudiar en profundidad el comportamiento de los temidos lobos, llegando a convivir con una manada, en la que se erigió como líder. El lobo fue uno de los animales más admirados por Félix que consiguió, a principios de los años 70, que el lobo ibérico dejara de considerarse una alimaña y se le catalogara como especie cinegética o de caza mayor.
Más tarde dirigió la Operación Baharí, en la que por primera vez se usaron halcones para ahuyentar las aves que entorpecían el despegue y aterrizaje de los aviones en los aeropuertos. Participó en varios programas de radio y televisión, entre los que destacó Planeta Azul.
Viajó a África, donde trabajó como guía de safaris fotográficos. Recorrió Uganda, Somalia, el Congo, Tanzania y Kenia. Fue precisamente en estos dos últimos países donde realizó sus primeros trabajos para Televisión Española: cinco episodios de la serie A toda plana.
Convertido en un símbolo del naturalismo, fue fundador de la Asociación para la Defensa de la Naturaleza, ADENA, la delegación española del Fondo Mundial para la Vida Salvaje, WWF. Así, Félix contribuyó en gran medida a la concienciación ecológica de España en una época en la que el país todavía no contaba con un movimiento de defensa de la naturaleza.
A partir de 1974 se embarcó en su proyecto más ambicioso: El hombre y la Tierra en sus tres series: venezolana, ibérica y canadiense. El hombre y la Tierra fue declarada en el año 2000 como Mejor Producción de la Historia de la Televisión en España por la Academia de las Ciencias y las Artes de Televisión
Precisamente se encontraba rodando un episodio de la serie canadiense y mientras filmaba una carrera de perros esquimales en Shaktoolik, Alaska, la avioneta en la que viajaba se estrelló. El "amigo de los animales" falleció el mismo día de su 52 cumpleaños. Su pérdida conmocionó al mundo entero y dejó un legado literario, radiofónico y fílmográfico imprescindible para el conocimiento de nuestra fauna.
Legado
La esencia del legado de Félix está precisamente en su humanidad; en su extraordinaria capacidad para despertar en toda una generación el innato sentido de pertenencia y respeto al entorno que todos albergamos; en su generosidad para compartir todo lo que aprendía y le hacía vibrar; en su fuerza para no abandonar la quimera de un futuro donde el hombre se reencontrara con la madre naturaleza; en su intuición al saber que los niños y jóvenes, inocentes y más próximos a la verdad, eran los verdaderos receptores de su mensaje y los únicos capaces de reconducir la espiral autodestructiva de la sociedad moderna. El verdadero legado de Félix es el fondo de su mensaje, atemporal y vital para el equilibrio del hombre en sintonía con el universo.
Treinta años después de su muerte, la perspectiva del tiempo nos permite valorar la importancia y el coraje de la trayectoria de un hombre que consiguió inculcar de forma natural y perfecta lo que hoy es de suma urgencia y actualidad: la protección, el respeto y el amor hacia la integridad del planeta que nos sustenta. Por esta razón, su legado cobra más fuerza cada día, su recuerdo se hace más importante como referencia para los que hemos recogido el testigo.
La obra de Félix Rodríguez de la Fuente no pereció con él. Transmitió su espíritu conservacionista y sus actitudes a toda una generación y encendió la llama de la divulgación de la naturaleza y de la concienciación ecológica.
FUNDACIÓN FÉLIX RODRÍGUEZ DE LA FUENTE
Con el objetivo de salvaguardar y proyectar la vida, obra y legado de Félix Rodríguez de la Fuente, y actualizar sus mensajes a través de nuevos proyectos, la familia del naturalista creó en 2004 la Fundación Félix Rodríguez de la Fuente.
Desde entonces, esta entidad privada, independiente y de interés público, trabaja por difundir el legado documental que Félix Rodríguez de la Fuente dejó; identificar y poner en red a actores relacionados con la ciencia y el medio natural en nuestro país, para tejer alianzas y establecer espacios de reflexión; desarrollar actividades de comunicación que conciencien al público sobre la trascendencia de restablecer una relación constructiva y sostenible con el medio natural e implicar a la sociedad en una participación activa en las soluciones para construir un futuro de convivencia y equilibrio con el medio.
Más Información
http://www.youtube.com/watch?v=DejuFH-iino&list=UUbpYmqYdE7mYm6XHxlV2w0Q&index=18