“Slow Ways, una oportunidad para el desarrollo rural y la preservación del patrimonio. El caso de la carretera N-623 Burgos-Santander” del investigador Javier Saiz Barrio y “Los modelos explicativos de la discapacidad: De la teoría de la tragedia personal al modelo de los derechos” de María Teresa Ortega Camarero han sido las dos ponencias más votadas por los estudiantes de doctorado durante las V Jornadas de Doctorando de la Universidad de Burgos.
Javier Saiz Barrio, en su ponencia, Slow Ways, una oportunidad para el desarrollo rural y la preservación del patrimonio. El caso de la carretera N-623 Burgos-Santander, señaló que las carreteras son elementos fundamentales para el desarrollo y el progreso de nuestra sociedad y es de esa importancia capital de donde nace el interés por asumir su carácter patrimonial y desarrollar dinámicas de protección y puesta en valor. Ese patrimonio viario no solo transporta al destino mercancías y viajeros sino que además permite acceder a bienes patrimoniales y cohesionar territorios.
En desplazamientos largos, las modernas autovías y autopistas están sustituyendo a las antiguas carreteras nacionales. La disminución del tráfico en estas últimas es una razón poderosa para que vayan desapareciendo servicios y las zonas que atraviesan se vayan empobreciendo y perdiendo población. Se advierte, por tanto, una necesidad de implementar dinámicas que corrijan una situación que se agrava día a día.
Algunas de esas vías tienen, además de todas las funciones anteriores, la virtud de discurrir por entornos de extraordinario valor paisajístico y patrimonial. Esas capacidades permiten entenderlas como slow ways, “carreteras lentas” que no solo facilitan llegar al destino sino que además permiten disfrutar del trayecto convirtiendo el viaje en una experiencia enriquecedora.
El trabajo de Javier Sáiz plantea un estudio de caso centrado en la carretera N-623 que une las ciudades de Burgos y Santander a través del puerto de El Escudo. Se trata de una vía que transcurre por espacios naturales de gran valor y belleza y en cuyo entorno cercano se localiza un numeroso, extraordinario y variado patrimonio cultural. Sin embargo, a pesar de esta riqueza, una buena parte de la ruta está fuertemente despoblada y cuenta con escasos servicios ¿Es posible aprovechar esta singular infraestructura lineal para ofrecer al visitante un producto cultural sugerente que sirva además para preservar el patrimonio y contribuir al desarrollo económico de las zonas por las que discurre?
El objetivo de este trabajo fue encontrar las claves para “comunicar” esos elementos notables de una forma novedosa, atractiva y eficaz. Los resultados se concretan en una serie de propuestas de actuación como: señalización específica de la ruta, construcción de miradores de impacto y de áreas de descanso interactivas, gamificación de los recursos patrimoniales, uso de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación como la realidad virtual, la realidad aumentada, el videomapping, etc.
El análisis global de todos los argumentos indica que el proyecto de transformar la vía en una slow way tiene todo el sentido y que, desarrollando las acciones adecuadas y con los apoyos institucionales imprescindibles, podría ser una realidad a medio plazo. La materialización de la ruta ayudaría a modernizar las dinámicas de ocio para los visitantes potenciando el turismo, favorecería la conservación del patrimonio, impulsaría la actividad económica en general pero, sobre todo, mejoraría la vida de las personas que habitan la que hemos llamado “franja de integración patrimonial” de la carretera N-623.
Los modelos explicativos de la discapacidad
María Teresa Ortega Camarero dijo en su intervención que las personas con discapacidad han sido objeto de análisis profundo por parte de las ciencias de la salud y de las ciencias sociales, especialmente por la psicología y las ciencias jurídicas. “Conocemos interesantes datos sobre la etiología de la discapacidad, los síndromes y los tratamientos que mejoran su calidad de vida. El estudio sociológico de la discapacidad es posterior y seguramente más limitado en nuestro país, si bien la categorización de la población y su análisis estadístico nos ha permitido conocer más sobre la cuantificación de la discapacidad, de su situación social y educativa y más recientemente de su acceso al empleo”.
En esta comunicación, realizó un breve recorrido por los modelos sociales que han explicado la discapacidad, en clave de evolución y de la influencia de la cultura, para entender como la realidad social de cada momento ha tenido y de hecho tiene influencia en cada uno de los modelos. Esto nos parece especialmente relevante por cuanto la manera en la que definimos los hechos sociales, la discapacidad en este caso, nos permite entender y evaluar la relevancia e interés de las políticas públicas, de los sistemas de intervención y de las nuevas metodologías que, sin duda hoy, tienden a lograr la plena inclusión de las personas con discapacidad y el ejercicio efectivo de sus derechos.
“Hemos podido analizar, siguiendo fuentes bibliográficas y documentales, como la evolución en el concepto y en la construcción de la discapacidad ha ido incorporando prácticas asistenciales; médicas y rehabilitadoras; y finalmente sociales. En el inicio, la discapacidad fue considerada como un “castigo divino” que implicaba prácticas eugenésicas y marginación. Es el Modelo de la Pescindencia. Desde la segunda mitad del siglo XX, se evoluciona hacia un modelo médico y asistencial, que acerca a las personas con discapacidad la posibilidad de una integración mediante la rehabilitación, y que hoy finalmente se entiende como la aceptación de la diferencia para su inclusión de manera plena en la sociedad. Como mayor logro de esa evolución, las personas con discapacidad son hoy, sin duda, sujetos de derechos”.
Según la doctoranda, en la actualidad, estamos asistiendo a un modelo explicativo de la discapacidad, el Modelo de los Derechos, apoyado en el concepto de diversidad funcional, que supone una evolución dentro del paradigma social, que comienza a incorporar a la discapacidad la influencia de los factores sociales a partir de la década de los 70. El hito, sin duda, para ese modelo es la publicación en el año 2006 de la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.
Sin duda, un avance que tiene gran impacto en las personas, y que es en parte resultado de los movimientos reivindicativos de las personas con discapacidad y de sus familias, que, como en otros movimientos como en el feminismo, han protagonizado los grandes cambios culturales contemporáneos.
Lo que si es cierto es que, este modelo, que efectivamente, a su juicio, tiene su mayor referencia en la Convención y en la normativa que la desarrolla, en España, la Ley General de Derechos de las Personas con Discapacidad y su Inclusión Social, tiene necesariamente que trascender del ámbito jurídico y comenzar a implementarse en los ámbitos sociales.
La realización de este modelo, como ideal alcanzable, requiere junto a un cambio jurídico, un cambio social, que se lograría mediante la educación y la sensibilización hacia una nueva concepción de la persona con discapacidad, de sus potencialidades y de sus derechos.
Sobre los dos doctorandos
María Teresa Ortega Camarero es licenciada en Sociología por la Universidad de Deusto. Profesional vinculada a la discapacidad desde el año 1998, en el que he desarrollado diferentes funciones y asumido responsabilidades en los ámbitos educativo y de empleo, desde 2010 como Directora Técnica de la Fundación CISA, Central Integral de Servicios de Aspanias (Burgos), actualmente en situación de excedencia.
Profesora asociada de Sociología en la facultad de Educación de la Universidad de Burgos e Investigadora Social en el ámbito de la Diversidad, el Tercer Sector y el Empleo.
Javier Saiz Barrio es Graduado en Comunicación Audiovisual con Premio Extraordinario de Grado y Máster en Patrimonio y Comunicación con Premio Extraordinario de Máster por la Universidad de Burgos. En la actualidad está desarrollando una tesis doctoral titulada Los ejes patrimoniales como elementos de desarrollo territorial. El paradigma de la carretera N-623 Burgos-Santander. Relacionado con su línea de investigación, ha realizado estancias doctorales en las universidades de Nova Lisboa y La Sorbona de París y actuado como ponente en varios congresos nacionales e internacionales. Es miembro colaborador del Grupo de Investigación Comunicación, Difusión y Publicidad de la Cultura y del Patrimonio (CAYPAT) de la Universidad de Burgos. En el plano laboral ha sido profesor de numerosos cursos de formación relacionados con la expresión gráfica en la Ingeniería y actualmente desarrolla su labor profesional como Técnico Superior del Ministerio de Fomento en Burgos.