El aprendizaje-servicio es un modelo pedagógico que combina las metas curriculares con servicios a la comunidad. Así, las universidades de Burgos, Granada y Jaume I de Castellón, han demostrado el efecto positivo que esta tipología de enseñanza tiene en alumnos que estudian para ser profesores de Educación Física. De los resultados obtenidos se puede concluir que estos estudiantes se sintieron altamente satisfechos con la experiencia, ya que mejoró su capacidad percibida para aplicar los conocimientos curriculares en contextos reales. A la vez vieron reforzados los procesos de toma de decisiones y favorecieron su confianza a la hora de afrontar retos reales de resolución de problemas.
La muestra se hizo sobre 181 estudiantes, utilizando un método mixto, en el que se analizaron tantos datos cuantitativos como cualitativos. El programa de aprendizaje-servicio se realizó con niños con necesidades educativas especiales y se basó en 4 etapas: la experiencia concreta, con un contacto inicial con los niños; la observación reflexiva, en la que pudieron contrastar información e intercambiar opiniones entre ellos; la conceptualización abstracta, en la que profundizaron en los contenidos curriculares, uniendo los objetivos de aprendizaje con los de servicio; y la experimentación activa, con la ejecución de las tareas diseñadas.
En el estudio se planteó la hipótesis de que el aprendizaje-servicio podría mejorar la personalidad activa. Esta se compone de cuatro categorías que interactúan mutuamente: fortalezas, demandas, desafíos y relaciones personales. Por ejemplo, las mejoras en el autoconcepto y la autoestima se consiguen a través de la reflexión personal sobre uno mismo, lo que a su vez alienta a los estudiantes a ajustar su comportamiento dentro del grupo de clase, aumentando así sus competencias sociales y habilidades de comunicación.
Si las experiencias sociales son exitosas, pueden ayudar a los estudiantes a reajustar sus expectativas, a ser más conscientes de sus habilidades y a desarrollar mayor potencial para hacer frente a los problemas con el fin de lograr sus metas sociales. La empatía puede aumentar cuando interactúan, no solo con sus compañeros de clase, sino también con los miembros de la comunidad involucrados en los programas.
Este estudio proporciona un hallazgo de investigación importante y especifico con respecto a las habilidades sociales, ya que la autorrealización social analizada aquí se refiere a las percepciones de los estudiantes sobre su propia dimensión social, más que a sus capacidades, habilidades o destrezas para la interacción y socialización.
Asimismo, se encontró que los formadores de docentes podrían considerar la implementación del aprendizaje-servicio como una opción apropiada para la capacitación de profesores de Educación Física más eficaces.
El estudio se ha llevado a cabo por los investigadores David Hortiguela-Alcalá, del Departamento de Didácticas Específicas, de la Facultad de Educación de la Universidad de Burgos, Oscar Chiva-Bartoll, del Departamento de Educación y Didáctica Específica de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales de la Universitat Jaume I, Antonio Baena-Extremera, del Departamento de Ciencias de la Educación de la Facultad de Educación, de la Universidad de Granada y Pedro Jesús Ruiz-Montero, del Departamento de Educación Física y Deporte de la Facultad de Ciencias de la Educación y el Deporte, de Granada.