Novaterra, proyecto europeo interdisciplinar el que participa la Universidad de Burgos, acudió a la Jornada Técnica “Sembrando cambios en la gestión integrada de plagas para una viticultura más sostenible” celebrada en las Bodegas Terras Gauda (D.O. Rías Baixas). Este encuentro reunió a 50 profesionales, entre investigadores, viticultores y responsables de empresas de España y Portugal.
Novaterra presentó sus principales resultados, encaminados a lograr una viticultura más sostenible y promover la gestión del viñedo siguiendo criterios medioambientales.
El profesor e investigador del área de Microbiología en la Universidad de Burgos, Gonzalo Sacristán, y el docente y coordinador del Centro de Investigación de Montaña en el Instituto Politécnico de Bragança, José Alberto Pereira, presentaron los avances de los ensayos en viñedo y olivo, respectivamente. Entre otros aspectos, se incidió en los efectos beneficiosos de la incorporación de cultivos de cobertura y márgenes florales, destacando el mantenimiento de la humedad y la temperatura del suelo; el aporte de nutrientes, la fijación de su estructura así como la contribución a la protección contra plagas. Estos beneficios han sido evaluados, utilizando datos recogidos del estudio realizado en el viñedo Aster, ubicado en la D.O. Ribera del Duero.
La jornada técnica estuvo organizada por la Plataforma Tecnológica del Vino (PTV) junto a la Fundación Empresa-Universidad Gallega (FEUGA) para abordar los desafíos a los que se enfrentan y las soluciones halladas en este ámbito bajo el lema “Sembrando cambios en la gestión integrada de plagas para una viticultura más sostenible”.
El foco se puso en compartir los conocimientos adquiridos con los viticultores de la zona para ampliar el alcance de los resultados y que puedan poner en la práctica estas técnicas que reducen el impacto ambiental manteniendo la viabilidad económica de las cosechas.
El director enológico de Bodegas Terras Gauda, Emilio Rodríguez Canas, explicó que se ha demostrado la posibilidad de reducir la fertilización con nitrógeno hasta en un 30 % sin afectar ni a la cantidad ni a la calidad de la cosecha. Esta reducción se ha llevado a cabo mediante la aplicación de la tecnología Optynite, tal como ha presentado la científica de campo e investigadora de CORTEVA Agriscience, Raquel Abad. Se ha ensayado la implementación de cubiertas vegetales y márgenes florales para fortalecer el control biológico de las plagas, que pueden afectar a los viñedos. Asimismo, en una de las parcelas de ensayo se han probado biosoluciones contra el Mildiu, para evaluar la eficacia de estos tratamientos alternativos más sostenibles con respecto a los convencionales.
Para hallar nuevas estrategias de manejo del suelo que aumenten la biodiversidad y productos alternativos con menos químicos para la protección de las plantas se ha mantenido una estrecha colaboración con CORTEVA agriscience, otro de los socios de NOVATERRA para promover la viticultura sostenible.
También se llevó a cabo una demostración con el robot Modular-E, desarrollado por INESC TEC (Portugal), demostrando su capacidad para cortar y recuperar biomasa del viñedo e incorporar estos materiales en compuestos biocompatibles así como la dosificación de diferentes bioproductos, siendo varios de ellos de origen microbiano. Los profesionales coincidieron en que su uso supondrá una revolución en la gestión y cuidado de los viñedos.
NOVATERRA
Las conclusiones finales del proyecto NOVATERRA se harán públicas en una conferencia final, que tendrá lugar en junio en Barcelona. Este evento marcará el cierre de un período de colaboración intensiva y hallazgos significativos en pos de una viticultura más sostenible.
El proyecto, financiado por la Unión Europea a través del Programa Horizonte 2020 y liderado por el Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentaria (IRTA, en Cataluña), reúne a 19 socios de España, Portugal, Francia, Italia, Grecia y Bélgica. Con un enfoque tanto en la viticultura como en la olivicultura, busca reducir el uso de productos fitosanitarios y mitigar su impacto negativo en la salud humana y el medio ambiente.
Por la Universidad de Burgos forman parte de este proyecto Gonzalo Sacristán Pérez-Minayo es experto en Microbiología Agroalimentaria, profesor, investigador y coordinador de las tareas del proyecto NOVATERRA en la Universidad de Burgos, contando con la colaboración de los investigadores de la UBU, Carlos Rad, Javier López Robles, Mª Milagros Navarro y Daniel Pérez Alonso, del Grupo de Investigación en Compostaje UBUCOMP así como la participación de miembros del ICCRAM y de la OTRI-Transferencia de la Universidad de Burgos. También pertenece al Equipo de Trabajo, como Personal Investigador, Andrea Martín Pablo, antigua alumna del Grado en Ingeniería Agroalimentaria y del Medio Rural de la UBU.