Muchas de las emociones que experimentamos con la música son fruto de la física, una ciencia que al final determina a nuestra biología por motivos adaptativos.
Esta es la principal idea que esgrimió la divulgadora científica Almudena M. Castro en su conferencia “Música Física y Cine” promovida por la Unidad de Cultura Científica e Innovación de la Universidad de Burgos (UCC+i UBU) y el Museo de la Evolución Humana (MEH) con la colaboración de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología - Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades (FECYT), como parte del ciclo "Acercando la ciencia".
La divulgadora en acústica y psicología de la percepción musical afirmó que todos los seres vivos de nuestra planeta, interactuamos con el aíre de nuestra atmósfera lo que implica que, al desplazarnos, movemos este aire produciendo sonidos en nuestro desarrollo vital. “Algunos de estos ruidos que percibimos pueden ser agradables o conocidos, mientras que otros puedes transmitir una sensación de peligro o inquietud”, comentó Castro. De ahí la relevancia de poder analizar el desarrollo cognitivo de las personas vinculado a los sonidos que llegan hasta cada uno de los individuos.
Al final, la música, a juicio de Almudena M. Castro, acaba evocando las voces y sonidos que nos rodean, produciendo en nosotros unas sensaciones diversas que nos hacen sentir diferentes emociones, de ahí que la conferencia hiciese alusión a diferentes bandas sonoras de películas muy conocidas por todos.