El rector de la Universidad de Burgos ha suscrito sendos convenios de colaboración con los presidentes de la Denominación de Origen Arlanza y la Asociación de Productores y Comerciantes "Las Caderechas".
Durante el acto Manuel Pérez Mateos ha estado acompañado de Miguel Ángel Rojo López, Presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Arlanza y José Gandía González, Presidente de la Asociación de Productores y Comerciantes “Las Caderechas”, titular de las marcas de garantía “Cereza y Manzana Reineta del Valle de Las Caderechas”.
El rector ha recordado la oferta histórica de ciencia y tecnología agroalimentaria y del Medio Rural en la Universidad de Burgos, 5 titulaciones, lo que significa una apuesta decidida de la institución académica burgalesa por el desarrollo de una de las actividades económicas con mayor potencial en Castilla y León.
En virtud de los dos convenios suscritos, investigadores del grado de Ingeniería Agroalimentaria y del Medio Rural realizarán estudios y trabajos en los ámbitos respectivos de las dos variedades de vino del Arlanza y de la producción frutícola del valle de Caderechas con el propósito de innovar y desarrollar nuevas técnicas, así como dar un mejor servicio a los agricultores e industrias agroalimentarias.
La UBU se ha comprometido a orientar la producción y la calidad y promocionar e informar a los consumidores sobre la Denominación de Origen de Arlanza y, en particular, sobre sus características de calidad.
Entre otras actividades estudiará el manejo del suelo para un desarrollo adecuado del viñedo, labores de poda, tanto de formación como poda en seco y en verde. Desnietado y deshojado, prácticas de abonado y aplicación de fitosanitarios, identificación y tratamiento de plagas y enfermedades de la vid, labores de recogida de la uva (vendimia), estudio de índices de calidad de la uva y cualquier actividad considerada de interés por ambas partes, conferencias, jornadas, talleres, etc. cuyo objetivo sea la divulgación y la transmisión del conocimiento.
En cuanto al acuerdo firmado con la Asociación de Productores y Comerciantes “Las Caderechas”, la UBU desarrollará labores de mantenimiento y adecuación del suelo y de la cubierta vegetal, labores de poda, tanto de formación como poda en seco y en verde, reproducción de frutales mediante prácticas de multiplicación: semillas, esquejes e injertos, prácticas de fertilización y aplicación de fitosanitarios en frutales, protección de los frutales mediante la identificación y el tratamiento de plagas y enfermedades, labores de recogida de los frutos, valoración de la calidad de los frutos y cualquier actividad considerada de interés por ambas partes, conferencias, jornadas, talleres, etc. cuyo objetivo sea la divulgación y la transmisión del conocimiento.
Desde hace tiempo, el Grado en Ingeniería Agroalimentaria y del Medio Rural colabora con estas dos entidades en actuaciones encaminadas a ampliar la actividad investigadora y de transferencia de tecnología y de conocimientos y desarrollo de iniciativas conjuntas de cooperación. Pérez Mateos recordó la plantación de viñas y frutales realizada este curso en las instalaciones de la Escuela Politécnica Superior (Milanera) que servirá para la realización de diversos estudios.
La Universidad de Burgos oferta este grado debido a la necesidad de la industria alimentaria de cubrir el vacío de ingenieros especializados en el sector de industrias agrarias y alimentarias capaces de hacer frente a los desafíos de un mercado y formados específicamente y en profundidad en este campo. La industria agroalimentaria es uno de los sectores líderes de empleo a nivel Europeo, debido al incremento de empresas del sector y a la necesidad de innovar y diferenciarse de la competencia.
Para su formación la Universidad de Burgos cuenta con unas modernas instalaciones en las que los alumnos desarrollan sus prácticas, que incluyen los laboratorios, el invernadero y el huerto ecológico.
Mediante las alianzas con empresas e instituciones como la DO de Arlanza y valle de Caderechas, la Escuela Politécnica se propone mejorar la calidad de la enseñanza y mostrar a los alumnos el ciclo vegetativo. Vinculados a estos estudios, este centro de la UBU cuenta con unas modernas instalaciones e infraestructuras necesarias, dotados con las últimas tecnologías, para la formación de los estudiantes en las que los alumnos desarrollan sus prácticas, que incluyen los laboratorios, el invernadero y el huerto ecológico, con bancadas en las que se cultivan numerosos productos. Además la Universidad colabora en proyectos conjuntos con el Centro de Albillos.
En un año complicado para el campo, los presidentes de las dos instituciones advirtieron del gran potencial de sus productos y agradecieron a la Universidad su colaboración en la potenciación de sus productos.
Para el seguimiento de estos convenios se constituirá dos comisiones formadas por cuatro representantes de la Universidad de Burgos, dos en cada una de ellas, y por dos representantes del Consejo Regulador de la D.O. ARLANZA y dos de la Asociación de Productores y Comerciantes “Las Caderechas”.