"La Universidad me enseñó a ser libre". Lo dijo Antonio Giménez-Rico en una de sus charlas en la Universidad de Burgos, ha recordado Manuel Pérez Mateos, rector de la UBU. “Hoy, tras su fallecimiento, me gustaría apostillar a esa memorable frase que él, su cine, sus guiones y la sabiduría y agudeza que siempre destilaba en su mirada al mundo y en su discurso también nos ha ayudado y nos sigue guiando para ser más libres. En mi nombre y en el de toda la Universidad de Burgos quiero transmitir nuestras condolencias a su familia y amigos. El de Antonio Giménez-Rico ya da nombre a nuestra Cátedra de Cine de la Facultad de Humanidades y Comunicación, pero su figura abarca aún más”, ha afirmado Pérez Mateos tras conocer el fallecimiento del cineasta burgalés.
Ignacio Fernández de Mata, decano de la Facultad de Humanidades y Comunicación, quiso expresar también sus condolencias por el fallecimiento de "uno de los más importantes directores de cine españoles y presidente, desde 2012, de la Cátedra de Cine Antonio Giménez Rico de la Universidad de Burgos".
La suya, ha afirmado Fernández de Mata, es una "imprescindible voz y mirada del siglo XX, Giménez Rico aceptó presidir la Cátedra de Cine que lleva su nombre y que está dedicada al conocimiento y promoción del cine español y, en especial, de su obra, en contacto y colaboración con otras instituciones como la Fundación Delibes y la Fundación Lumière gracias a la generosidad de su presidente. Antonio colaboró con gran entusiasmo con la Universidad de Burgos impartiendo un buen número de presentaciones, conferencias, master class y talleres a los estudiantes de Comunicación Audiovisual, el último, en 2019. Recordaremos a Antonio por su magisterio inteligente y ameno, plagado de anécdotas, sucedidos y nombres de la época clásica del cine americano y de la historia del séptimo arte español que tan brillantemente protagonizó él mismo. Se nos ha ido un maestro y un amigo. Sit tibi terra levis".
Antonio Giménez-Rico Sáenz de Cabezón nació en Burgos en 1938 y se licenció en Derecho por la Universidad de Valladolid, además de estudiar Periodismo. Fue crítico cinematográfico durante años en la revista Cinestudio y se inició en el mundo del cine como ayudante de dirección de Vittorio Cottafavi y Eugenio Martin, entre otros. En 1967, tras trasladarse cuatro años antes a Madrid para compaginar sus estudios de periodismo y piano, estrenó su primera película, El Hueso. En 1972 empezó a trabajar para Televisión Española, en la dirección de series como Página de sucesos o La balada del pequeño soñador.
La obra de Miguel Delibes inspiró algunas de sus mejores proyectos como director, destacando Retrato de familia (1976), inspirada en la obra Mi idolatrado hijo Sisí; El disputado voto del señor Cayo (1986) o Las ratas (1997), que se convirtieron en obras de referencia dentro de su carrera.
Giménez Rico fue también fundador y director de la Asamblea de Directores y Realizadores Cinematográficos de España (ADIRCE), y presidente, entre 1988 y 1992, de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España.
En 2005 dirigió el cortometraje Castilla y León, Patrimonio de la Humanidad, financiado por el gobierno autonómico y dedicado íntegramente a los bienes castellanos y leoneses declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Además, a lo largo de su carrera fue seleccionado, reconocido y premiado en festivales internacionales de cine como Bratislava, Berlín, Montreal, San Sebastián, Valladolid…, siendo también jurado internacional en los Festivales Cinematográficos de Praga, Moscú, Montreal y Valladolid.
En 2014 recibió el Premio Águila de Oro del Festival Internacional de Cortometrajes de Aguilar de Campóo, ese mismo año fue nombrado académico honorario de la Academia Burgense de Historia y Bellas Artes de la Fernán González y en 2015 fue reconocido con el Báculo de San Lesmes, otorgado por la Asociación de Peñas y Sociedades de San Lesmes de Burgos.