Blindar la democracia, no imponer límites, defender los procedimientos y las leyes, educar y evitar el victimismo mediante la ilegalización de partidos políticos han sido alguno de los argumentos esgrimidos esta mañana en el V Torneo Regional de Debate Universitario de Castilla y León, cuya final han disputado en el Aula Magna del Hospital del Rey la Universidad de Burgos y la Universidad de Salamanca con el tema ¿Es conveniente ilegalizar partidos con valores no democráticos en regímenes democráticos?
Tras dos días de debates, se ha impuesto el equipo de la Universidad de Salamanca -integrado por Ramón Brais Freire Braña, Pilar Talavera Cordero, ambos del doble Grado de Derecho y Ciencia Política, Pablo Mezquita Domínguez, del máster de Abogacía; y Álvaro Sánchez García, del Grado de Ciencia Política,- frente al equipo Vincitori de la Universidad de Burgos formado por Eduardo Martín Ortiz, Gonzalo Arina Ángulo, Iván Piñero Gutiez y Sergio Álvarez Quintana, un grupo de cuatro alumnos de la Facultad de Derecho tutorizado por el profesor José Javier Ibeas Santamaría.
Los universitarios han puesto de manifiesto que el pluralismo político es imprescindible, pero que al mismo tiempo son necesarios los límites previstos por el legislador ante los ataques que podría sufrir la democracia por lo que tanto en España como en Europa está abierta la puerta a la ilegalización de formaciones políticas como ocurrió con Herri Batasuna en 2003.
Entre otras cuestiones, esgrimieron la amplia jurisprudencia tanto de los tribunales españoles como del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que alega la inviabilidad de un partido cuando éste o sus líderes inciten a la violencia o no respeten las reglas del juego; se refirieron a la paradoja de tolerancia descrita por el filósofo austríaco Karl Popper en 1945 enmarcada dentro de la teoría de la decisión, que declara que si una sociedad es ilimitadamente tolerante, su capacidad de ser tolerante finalmente será reducida o destruida por los intolerantes y advirtieron también del peligro que supuso para la democracia y la liquidación de las instituciones la ideología del Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán que abocó en la Segunda Guerra Mundial.
El tercer premio en esta Liga de Debate ha recaído en el equipo de la Universidad de Salamanca A y el cuarto en Debatroncos de la Universidad de León.
En esta confrontación dialéctica, Juan Colino Domínguez, de la Universidad de Salamanca A, ha ganado el premio al mejor orador y Pablo Mezquita Domínguez, del equipo USAL B, se alzó con el premio al mejor refutador
Este torneo demostró una vez más que la Liga de Debate potencia y fomenta entre los estudiantes de las Universidades de Castilla y León aptitudes como la oratoria, la argumentación, refutación y la confrontación de ideas en público y permite el manejo de todo tipo de herramientas expresivas. Se trata como señala la vicerrectora de Estudiantes, Verónica Calderón, de un magnífico ejercicio de convivencia donde priman el conocimiento y la fuerza del diálogo y los argumentos.