El pasado sábado 22 de marzo se celebró el Día Mundial del Agua 2025, organizado por Naciones Unidas, en esta ocasión bajo el lema “Salvemos los Glaciares”, con la intención de concienciar a la sociedad de la progresiva desaparición de estas masas de hielo por efecto del calentamiento global que provocan las emisiones de gases de efecto invernadero.
La Universidad de Burgos (UBU) a través de su Oficina Verde (UBUverde) organizó la Semana del Agua 2025 entre los días 17 y 22 de marzo, con un gran número de actividades centradas en el objetivo de conocer el insustituible papel que juegan para la naturaleza, la biodiversidad y las sociedades humanas, las masas de agua. Más de 500 personas se sumaron al programa y pudieron concienciarse sobre la necesidad de proteger nuestros ríos y lagos, así como nuestros acuíferos y mares.
En la mañana del lunes 17 de marzo, se realizó una visita a las instalaciones de la Estación Depuradora de Aguas Residuales de Burgos (EDAR) de Villalonquéjar que gestiona Aguas de Burgos. Esta visita permitió conocer una de las plantas de depuración de Aguas Residuales Urbanas más innovadoras de España que, tras su reciente reforma, incorpora las tecnologías más avanzadas en ingeniería ambiental, gracias a lo cual las aguas que vierte la ciudad de Burgos y sus polígonos industriales al río Arlanzón, cumplen la normativa de vertidos tanto española como europea, con una capacidad de tratamiento para unos 800.000 habitantes equivalentes. Durante el año 2015 se trataron en la EDAR de Villalonquéjar un total de 29.989.738 m³ de agua bruta procedente de la ciudad de Burgos, así como de su alfoz, con concentraciones medias de 285 mg/1 de SS y 483 mg/1de DB05, las cuales resultan uniformes en relación a los datos de los años precedentes. Se consiguieron unos rendimientos medios de eliminación de carga contaminante del 97,7 % para SS y 95,4 % para DB05. Se extrajeron de la EDAR 45.730,11 Tm correspondientes a lodos deshidratados, con una sequedad media del 16,7%. El peso seco medio de estos lodos sería por lo tanto de 7.636,92 Tm. Se transportaron a la planta de compostaje 35.560,24 Tm de residuos, y en aplicación directa de lodos en suelos agrícolas, 10.162,87 Tm.
El mismo día, ya por la tarde se proyectó el documental “Océanos de Plástico”, que presenta con rigor como el vertido masivo e incontrolado de plásticos y productos químicos está poniendo en grave riesgo toda la cadena alimentaria marina. Las cifras son alarmantes: el 80% de la basura que se arroja al mar cada año está compuesta por plásticos. Cada metro cuadrado de océano está cargado con miles de estos residuos altamente dañinos. La comunidad científica ha alertado sobre la magnitud de esta contaminación y los devastadores efectos que está teniendo en las especies marinas.
Ya el martes 18 de marzo, y gracias a la colaboración de Aguas de Burgos, más de cuarenta personas visitaron las instalaciones de la Estación de Tratamiento de Aguas Potables de Arlanzón (Burgos), una de las plantas de potabilización de Aguas de Consumo más innovadoras de toda la geografía española, que permite que las aguas captadas del Embalse de Úzquiza lleguen a todos los hogares de Burgos, a sus empresas y a más de 70 localidades del Alfoz en óptimas condiciones para su consumo, con un tratamiento anual cercano a los 26 hectómetros cúbicos anuales, lo que equivale a más de 800 litros por segundo.
Al día siguiente, cerca de cincuenta personas, aprovecharon la oportunidad de visitar los Depósitos de Aguas Potables del Cerro de San Miguel. Las aguas del río Arlanzón captadas en el embalse de Úzquiza, son tratadas en la Planta Potabilizadora de Arlanzón (ETAP) y desde allí, a través de una red de tuberías, trasladada, con un caudal aproximado de 1000 litros/segundo a la ciudad de Burgos, almacenándose en su red de depósitos. En la actualidad existen cinco grupos de depósitos de agua en Burgos. El situado en el Cerro de San Miguel (el más antiguo), que puede albergar una reserva de 32.000 metros cúbicos; el ubicado en las proximidades del polígono industriales de Gamonal (20.000 metros cúbicos); el del polígono (12.000) y el del monte de la Abadesa (1.500) y el último realizado, el de Cortes, donde se ha construido un nuevo depósito de regulación de 40.000 m3 de capacidad, el único además que necesita bombear el agua.
Estos primitivos depósitos de agua del Cerro de San Miguel datan de 1892, y encierran todos los secretos del Castillo de Burgos porque hasta esta zona, en plena invasión francesa apenas un siglo antes, llegaban los dominios de la fortaleza. Una visita que sorprende por su espectacularidad al penetrar en las entrañas del cerro. Ahí se custodian 131 años de historia de la ciudad. Las catacumbas del agua de Burgos llevan en sus bóvedas piedras milenarias que provienen del desaparecido monasterio de San Cristóbal de Ibeas, que se ubicaba en San Millán de Juarros. A mediados del siglo pasado, el Ayuntamiento de Burgos realizó una ampliación de los depósitos de agua con una enorme bañera en la que ya no se usó piedra, sino que se aplicaron las técnicas constructivas del momento, basadas en el hormigón armado. En el siglo XXI, Burgos cuenta con otros depósitos en la zona de Cortes.
El jueves 20 de marzo se celebró la conferencia "El ciclo integral del agua en Burgos", impartida por Mirian Fernández Lara, directora técnica y José Alberto Ronda Díez, responsable de Nuevas Tecnologías de Aguas de Burgos, además de su gerente Antonio G. Pastrana. Los ponentes ofrecieron una detallada sobre el recorrido del agua en esta ciudad y su entorno. La conferencia ofreció un espacio de intercambio de ideas y propuestas sobre la mejora de la gestión del agua, involucrando a ciudadanos, autoridades locales y expertos en la búsqueda de soluciones innovadoras para enfrentar los retos ambientales y sociales asociados al ciclo hídrico. Solo la visualización online de esta Conferencia Ambiental ha supuesto un seguimiento cercano a las trescientas personas.
La Semana del Agua de la Oficina Verde de la Universidad de Burgos (UBUverde), culminó el sábado 22 de marzo, Día Mundial del Agua, con un recorrido hidrogeológico por los manantiales kársticos de la Comarca de Pinares Burgos-Soria en una ruta que reunió a 55 personas. El Hidrogeodía es una jornada de divulgación de la Hidrogeología y de la profesión del hidrogeólogo, con motivo de la celebración de este día mundial, promovida por el Grupo Español de la Asociación Internacional de Hidrogeólogos (AIH-GE). Es la quinta vez que la Universidad de Burgos se suma a esta iniciativa a través de UBUverde.
La jornada, conducida por el hidrogeólogo Luis Marcos (UBU), consistió en un itinerario accesible en el que participaron personas de todas las edades, visitando zonas que muestran el papel de las aguas subterráneas y la necesidad de aplicar técnicas hidrogeológicas para diagnosticar y corregir problemas o poner en valor algún hecho.
El recorrido de esta ruta hidrogeológica ambiental permitió conocer el funcionamiento de los acuíferos kársticos del Jurásico y del Cretácico de la orla mesozóica de las Sierras de la Demanda y de Urbión. El territorio de Pinares y Sabinares de Burgos-Soria, sorprendió a los participantes; una zona de especial belleza paisajística, forestal y ecológica, donde los Espacios Naturales de la Fuentona de Muriel y del Cañón del Río Lobos, determinan no solo la altísima calidad faunística y botánica de estos entornos, sino también su importancia e interés hidrogeológico.
Se visitaron, en unos momentos en que las intensas precipitaciones han llevado a arroyos, ríos y cascadas a mostrar caudales muy significativos y llamativos, interesantes paisajes hidrogeológicos asociados a los materiales geológicos mesozoicos de los entornos del Sistema Ibérico, manantiales kársticos en el entorno del Río Lobos, así como enigmáticas y sugerentes surgencias, bellos espacios ya venerados por las poblaciones arévacas hace más de 2500 años. Este iniciático recorrido hídrico discurrió también por el Chorrón de Cabrejas del Pinar, la Fuentona de Muriel, el nacedero del río Ucero o el manantial de Fuencaliente del Burgo.
Este Hidrogeodía 2025 no solo permitió adquirir significativos e interesantes conocimientos sobre el comportamiento de las aguas subterráneas, sino conocer parajes extraordinariamente bellos, así como singulares localidades por las que el tiempo no parece haber transcurrido, como Calatañazos, donde hubo un espacio de tiempo para la comida y reponer fuerzas. Un bello recorrido por algunos de los espacios montañosos y boscosos más atractivos del sureste de la provincia de Burgos y del noroeste de la provincia de Soria.