Un grupo de 200 investigadores miembros de la iniciativa global Event Horizon Telescope, ha conseguido realizar la primera fotografía de un agujero negro que se encuentra a 55 millones de años luz de la Tierra, en el centro de la galaxia Messier 87. El catedrático de la UBU y miembro del grupo de investigación de Física Matemática, Ángel Ballesteros Castañeda, explica la toma de la primera fotografía de un agujero negro, un hecho histórico en el mundo astronómico.
Ballesteros nos advierte que la fotografía es de la sombra de un agujero negro, ya que un agujero negro no se ve “Lo que se ve es la nube de gas, que, al atraerla el agujero negro, se acelera y emite luz”. Según el catedrático el tamaño de este agujero negro “sería como una pelota de tenis en la tierra, vista desde la luna” y los astrónomos para observar estos objetos tan pequeños se necesitan telescopios.
Para obtener esta imagen han sido necesarios 8 telescopios repartidos por la superficie terrestre, uno de ellos en Sierra Nevada, y recibir señal sincronizada de esos telescopios durante 4 días para procesarla como si fuera un gran telescopio del tamaño de la tierra.
Esta imagen confirma la Teoría de la Relatividad general de Einstein y supone un importante paso adelante en la comprensión de los agujeros negros