Profesorado: Rafael Calvo de León y Lourdes Bustamante Díez
Titulación y asignaturas: “Animación Sociocultural” y “Social Education in a Global World” de 2º curso del Grado en Educación Social.
Entidades participantes: Residencia para personas mayores de San Agustín (Diputación de Burgos), Residencia de Cortes (Junta Castilla y León), Residencia Fundación Caja Burgos), Residencia San Julián y San Quirce (Barrantes), Residencia Hermanas Hospitalarias, Centro Geróntológico de Burgos, Residencia Hermanas Angélicas, Residencia Santa Teresa de Jesús Bonet y Residencia Plaza Real.
Personas destinatarias: entre 130 y 150
Resumen: Las residencias de personas mayores, son recursos sociosanitarios donde acude la población con una media de edad superior a 70 años, y que manifiestan algún tipo de dependencia física, psicológica, y/o social. Residen allí para tener cubiertas todas sus necesidades y poder hacer una vida lo más normalizada posible, procurando que sea activa y participativa. Después de la pandemia se ha observado que las personas mayores que viven en residencias han visto mermadas muchas de sus capacidades a nivel físico y emocional entre otras. Esto ha sido debido sobre todo a la reducción de actividades en el día a día y a la poca o nula socialización debido a la restricción de contactos; sobre todo con personas ajenas al Centro. Para nuestros estudiantes del Grado de Educación Social es muy importante el conocimiento de este grupo de edad y de sus necesidades, pues es una población concreta de su campo profesional. Hoy en día, una actividad que favorece la salud psicoemocional recomendad por la OMS por su gran valor preventivo y antidepresivo es reír, la risa (Arismendiz-Izquierdo € MelgarMorán, 2017). Su principio básico reside en estimular la producción de distintas hormonas que genera el propio organismo con ejercicios y juegos. Si tenemos en cuenta que el hecho de bailar es inherente al ser humano, en cualquier momento histórico y cultural, estas actividades rítmico-corporales tienen por tanto un carácter ontológico, lo que genera una motivación intrínseca natural fundamentada principalmente en el movimiento, el gesto y otros aspectos (Zagalaz, 2005). En este proyecto ApS se van a promover actividades corporales rítmico-expresivas adaptadas a las personas mayores participantes.
Vamos a desarrollar, por tanto, un taller donde incluiremos tanto el baile como la risa como ejes principales de la acción educativa. El proyecto se desarrollará en tres fases:
1ª Fase: Toma de contacto, es decir, una sesión dinámica previa en los centros con las personas mayores para conocer el estado de bienestar, interés, motivación y sus expectativas sobre el proyecto. Se trata de saber el grado de movilididad y equilibrio, así como cognitivo que tienen cada una de ellas.
2ª Fase: Realización de un taller práctico sobre el baile y la risa. Este taller se llevará a cabo dos o tres semanas después en cada una de las residencias con una duración aproximada de dos horas. Se pasará un cuestionario por parte del alumnado a las personas participantes en el proyecto.
3ª Fase: Reunión final entre los grupos de estudiantes y de personas mayores para poner en común los resultados de la actividad. De nuevo, se les presentará el cuestionario final para evaluar los objetivos del proyecto.
Se realizará el proyecto en 9 residencias de personas mayores. En cada una de ellas intervendrán entre 5/6 alumnos/as. Se trabajará entre otras habilidades: el movimiento, la coordinación motriz, el ritmo, la gesticulación, la comunicación, la expresión corporal, la respiración, el control postural y el sentido del humor. El proyecto se supervisará en cada residencia por las dos personas responsables del mismo y por profesionales de los propios centros