El Consejo de Gobierno de la Universidad de Burgos ha aprobado hoy en sesión ordinaria celebrada, por segunda vez en su historia, de manera telemática el "Plan de Regreso Progresivo a la Actividad Presencial en la Universidad de Burgos tras la Alerta Sanitaria por COVID-19”.
Dicho plan, que representa una guía organizativa de las medidas de desescalada en la UBU en función de los planes dictados por el Gobierno y las autoridades sanitarias, no contempla cambio alguno en los planes de enseñanza y evaluación, que seguirán desarrollándose de modo telemático hasta la finalización del presente curso académico. Tampoco altera el calendario del presente curso, en el que se habilitó el mes de julio para la realización de pruebas. La posible modificación del calendario académico del curso 2020-2021 será acordada posteriormente en función de la evolución epidemiológica.
El documento aprobado esta mañana por el máximo órgano de gobierno de la Universidad de Burgos incluye medidas destinadas a establecer las debidas garantías en materia de seguridad y salud para cada una de las fases de desescalada establecidas por el Ministerio de Sanidad, basándose en “el sentido de solidaridad y responsabilidad personal e institucional”. Dichas medidas serán de “obligado y estricto cumplimiento para todas las personas y colectivos pertenecientes a la comunidad universitaria que ejerzan actividades presenciales en instalaciones de la Universidad”.
Antes de su aprobación, el rector ha hecho mención a la situación epidemiológica existente actualmente en España y Castilla y León, poniendo de manifiesto que tenemos 15 veces más casos que cuando se inició la pandemia y que, por tanto, el riesgo sigue siendo extremadamente elevado. Por ello ha manifestado que “el plan se ha planteado con la mayor prudencia posible, teniendo en cuenta que la institución académica puede seguir prestando una enseñanza de calidad en la modalidad no presencial”.
Su redacción ha contado con el informe favorable del Comité de Seguridad y Salud de la UBU y sometido a consulta del Comité Coordinador COVID-19, de los representantes del personal docente e investigador (PDI) y de administración y servicios (PAS), de las centrales sindicales y de los representantes del alumnado de la Universidad de Burgos. Además, incorpora algunas de las más del centenar de alegaciones recibidas esta semana durante su periodo de exposición pública a la comunidad universitaria.
Informe del rector
En su habitual informe, el rector Manuel Pérez Mateos ha mostrado la satisfacción de la Universidad de Burgos por la derogación, por parte del Consejo de Ministros, del sistema de horquillas para precios públicos de matriculación en la enseñanza universitaria, que reducirán el precio de la primera matrícula de grado. Una reivindicación, ha señalado Pérez Mateos, “que este Rectorado lleva planteando desde el inicio de su mandato rectoral, ya que contribuirá a impulsar la igualdad de oportunidades y supondrá un paso más para la vertebración y cohesión social del país, al reducir la diferencia de precios existente entre matrículas universitarias”.
Por otro lado, Pérez Mateos ha dado cuenta de la solicitud elevada por los rectores españoles al Ministerio de Universidades para que se establezcan los procedimientos oportunos que permitan la anulación de la suspensión de plazos administrativos y la UBU pueda llevar a cabo los procesos de contratación de profesorado y el desarrollo de sus ofertas públicas de empleo. En este sentido, el rector burgalés anunció que “hemos solicitado al Ministerio que elabore una instrucción para permitir la renovación de los contratos de nuestros profesores asociados que están padeciendo, como profesionales autónomos, las negativas consecuencias de esta crisis”.
Por último, el rector de la UBU ha señalado que si bien tanto el RD 463/2020 como las resoluciones universitarias prohíben toda actividad docente presencial, incluidas las prácticas externas en empresas, las universidades españolas han solicitado que se levanten dichas restricciones en paralelo con las medidas de desescalada progresiva, y ha afirmado que “en la UBU se autorizará la realización de prácticas a aquellos alumnos que así lo deseen, siempre que haya consentimiento expreso del estudiante, la empresa y los tutores correspondientes y las disposiciones gubernamentales lo permitan”.