Narrar con las manos para integrar a todos

73 futuros profesores de Educación Primaria participaron ayer en el cuentacuentos en lengua de signos que ARANSBUR realizó en la UBU

“Las aulas cada vez son más eclécticas, más heterogéneas, con niños que cada vez tienen más necesidades especiales”, es una realidad que constata la profesora de Didáctica de la literatura infantil y de la animación a la lectura y la escritura de la UBU Marta Miguel Borge. Por ello desde la universidad uno de los mayores empeños es acercar no sólo la teoría sino parte de la realidad que los futuros profesores se van a encontrar en las aulas. Y con esta intención se realizó el cuentacuentos ‘Las brujas colorean’, a cargo de ARANSBUR, en el que Conchita García, Elena Hermoso y Rebeca París acercaron la lengua de signos a 73 estudiantes de cuarto curso del Grado en Educación Primaria en una actividad que se puede replicar con menores y en la que participan y disfrutan todos, tanto oyentes como no oyentes. 

Desde ARANSBUR, Conchita García destaca la importancia de que quienes serán profesionales de la educación “tomen conciencia de la importancia de coordinarse con nosotros en su día cuando trabajen en un cole, que conozcan la diversidad de personas sordas que hay, que sepan algo de lengua de signos, si ese niño lo requiere, o que sepan cómo utilizar un implante o un sistema de FM”. De hecho, las preguntas sobre las características y el uso de algunos sistemas alternativos de ayuda a la comunicación fueron las que ocuparon gran parte de la charla que se mantuvo tras el cuentacuentos y en la que se quiso mostrar a los alumnos las herramientas de las que disponen para trabajar con personas con discapacidad auditiva en los centros educativos. 

“Para nosotros también es muy importante el Centro Especial de Empleo de ARANSBUR, que se dedica a suprimir las barreras de comunicación, y luchamos constantemente para que por lo menos todo lo que haya en Burgos sea accesible y que podamos estar al mismo nivel que una persona oyente”, señala Rebeca París, que pone en valor algunas de las últimas iniciativas para favorecer la accesibilidad que se han puesto en marcha en la ciudad, como la interpretación de los conciertos de San Pedro, el himno a Burgos o algunas obras de teatro en lengua de signos. Estas iniciativas, coinciden todas ellas, hace que se conozca mucho mejor la situación de las personas con discapacidad auditiva y que la accesibilidad global cada vez se tenga más en cuenta en diferentes sectores.